¿Fue víctima de Sean 'Diddy' Combs? Justin Bieber rompe el silencio

En medio del escandaloso juicio federal por tráfico sexual que enfrenta el productor musical Sean "Diddy" Combs, el nombre del cantante Justin Bieber comenzó a circular insistentemente en redes sociales.

Todo a raíz de un antiguo video de 2009 en el que ambos aparecen interactuando, lo que generó especulaciones sobre un posible vínculo inapropiado. Sin embargo, el equipo del cantante canadiense ha salido al paso de los rumores: “Justin no está entre las víctimas de Sean Combs”, aclararon categóricamente a través de un comunicado difundido inicialmente por TMZ y replicado por medios como Fox News, E! News, The Independent y Men’s Journal.

“Aunque Justin no está entre las víctimas de Sean Combs, sí hay personas que realmente fueron dañadas por él. Desviar la atención de esa realidad socava la justicia que esas víctimas merecen”, señaló su representante.

La declaración apunta a frenar el ruido mediático generado por una ola de publicaciones en redes sociales tras el inicio del juicio contra Combs, que enfrenta cargos por delitos federales relacionados con tráfico sexual, coerción y abuso sistemático de poder durante más de dos décadas.

La pieza audiovisual que encendió las alertas data de 2009. En ella, Combs, entonces de 40 años, aparece junto a un joven Bieber de 15, afirmando: “Durante las próximas 48 horas está conmigo y vamos a volvernos completamente locos”, a lo que el adolescente responde sonriente: “Vamos a buscar chicas”.

Aunque el tono podría interpretarse como festivo o promocional, su resurgimiento en redes generó preguntas sobre la naturaleza de la relación entre ambos. Las especulaciones se intensificaron cuando salieron a la luz otras interacciones en eventos públicos en 2009 y 2011, incluida una aparición conjunta en Jimmy Kimmel Live! donde se habló de una supuesta promesa de Combs de regalarle un Lamborghini a Bieber. El productor respondió con tono de advertencia: “Él sabe que no debe hablar en televisión nacional sobre lo que hace con Big Brother Puff”.

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Pese a la polémica, TMZ y Men’s Journal coincidieron en que varias fuentes cercanas a Bieber aseguraron que nunca existió una conducta inapropiada. De hecho, recalcaron que la relación era más cercana con los hijos de Combs, Quincy y Justin Combs, lo que explicaría la frecuente presencia del joven artista en eventos vinculados al productor.

El proceso judicial contra Sean Combs, de 55 años, se desarrolla en el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York bajo la dirección del juez Arun Subramanian, y ha expuesto una red de abuso sexual que, según la Fiscalía, funcionó entre 2004 y 2024. Las acusaciones lo vinculan con la organización de eventos conocidos como freak offs, reuniones donde mujeres y hombres eran presuntamente forzados a mantener relaciones sexuales bajo coacción, amenazas y uso de drogas.

Una de las piezas centrales del caso es el testimonio de Casandra “Cassie” Ventura, expareja de Combs, quien denunció haber sido violada, golpeada, chantajeada e intimidada. Cassie afirmó haber sido grabada sin consentimiento durante actos sexuales organizados por el productor, situación que, según declaró ante la corte, la mantuvo atrapada bajo un ciclo de violencia y manipulación emocional.

Fox News reveló que existen videos de 2024 en los que se muestra a Combs agrediendo físicamente a Ventura en un hotel de Los Ángeles. Estas grabaciones, junto con mensajes de texto y declaraciones juradas, han sido presentadas por la Fiscalía como pruebas clave en el juicio.

Por su parte, la defensa legal del productor, encabezada por la abogada Anna Estevao, ha intentado desacreditar los testimonios y minimizar las pruebas. Durante la apertura del juicio el pasado 12 de mayo, Estevao declaró: “Puede que conozcan su afición por el aceite de bebé, pero eso no es un crimen federal”, en una frase que rápidamente generó controversia por su tono trivializador frente a la gravedad de los cargos.

La defensa también presentó mensajes de texto con contenido afectuoso entre Combs y Ventura, fechados en 2016, en un intento por contradecir las denuncias. Cassie, sin embargo, confirmó la autenticidad de los mensajes, explicando que formaban parte de un patrón sistemático de control emocional.

Sean “Diddy” Combs, reconocido por su impacto en la música y fundador del influyente sello Bad Boy Records, ha trabajado con grandes figuras como Notorious B.I.G., Usher y Mary J. Blige. Justamente fue Usher quien apadrinó los inicios de Bieber en la industria, lo que explicaría también la conexión indirecta entre el joven cantante y Combs.

Pese a su legado artístico, el juicio actual pone en tela de juicio una carrera entera. Mientras tanto, Justin Bieber, una de las estrellas más visibles de la última década, pide que no se use su nombre para distraer de los verdaderos sobrevivientes. En una frase contundente, su portavoz remarca la prioridad: “Hay personas que realmente fueron dañadas por él. Desviar la atención de esa realidad socava la justicia que esas víctimas merecen”.

El proceso judicial sigue en curso y se espera que en las próximas semanas se escuchen más testimonios clave. Lo que está claro es que el caso contra Combs ha destapado una compleja red de poder, abuso y silencio en lo más alto de la industria del entretenimiento.