El negociador de EEUU en Afganistán se reúne con el presidente Ghani en Kabul
El enviado estadounidense para Afganistán, Zalmay Khalilzad, se reunió el lunes en Kabul con el presidente afgano, Ashraf Ghani, para intentar reencauzar el proceso de paz, amenazado por la violencia y las dudas sobre la retirada de las fuerzas extranjeras.
En el encuentro ambas partes "abordaron las próximas etapas del proceso de paz y resaltaron los esfuerzos adicionales que se deben cumplir para acelerarlo", afirmó en Twitter una portavoz de la presidencia afgana.
Khalilzad "reafirmó que Estados Unidos jugará un papel productivo para llevar la paz al país", añadió.
Se trata de la primera visita a Afganistán de Khalilzad desde que fue confirmado en sus funciones a finales de enero por el nuevo presidente Joe Biden.
Nombrado por el expresidente Donald Trump, este veterano diplomático fue el artífice del acuerdo firmado por Washington con los talibanes en febrero de 2020 en Doha, que prevé la retirada completa de las tropas extranjeras de Afganistán de aquí a mayo.
Este acuerdo también permitió la apertura en septiembre en Doha de negociaciones de paz entre los insurgentes y el gobierno afgano. Pero estos encuentros están encallados, en un contexto de violencia creciente en estos últimos meses.
La administración Biden ordenó revisar el acuerdo de Doha, que ponía como condición a la retirada estadounidense garantías de seguridad por parte de los talibanes y su compromiso a terminar con todo vínculo con organizaciones terroristas como Al Qaida.
En Kabul, Khalilzad también se entrevistó con Abdulá Abdulá, presidente del Alto Consejo para la Reconciliación Nacional, el organismo gubernamental que supervisa el proceso de paz en Catar.
Las dos partes "hablaron de las negociaciones de Doha y de la revisión de la administración estadounidense del acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes, así como de los medios para lograr una solución política negociada en Afganistán", indicó un portavoz de Abdulá.
Khalilzad viajará luego a Catar para reunirse con responsables talibanes, y también se dirigirá a varios países de la región, que no fueron precisados por el Departamento de Estado norteamericano.