¿Ayudan realmente los subsidios a combatir la pobreza en Panamá?

Ciudad de Panamá/En medio del esfuerzo por reducir la desigualdad social, el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) destina cada año más de 260 millones de dólares en programas de transferencias monetarias, dirigidos a las poblaciones más vulnerables del país. Sin embargo, la efectividad de estas ayudas como herramienta para erradicar la pobreza sigue siendo motivo de debate entre autoridades, expertos y la ciudadanía.

"A través del subsidio, no cambiamos la condición de pobreza. Le damos un apoyo para que pueda valerse, pero los subsidios no son programas que resuelvan el problema. Más bien, ayudan a sostener a las personas en su condición de pobreza", señaló Beatriz Carles de Arango, ministra del Mides.

En contraste, el economista Raúl Moreira ofrece una visión diferente: "Si no existieran estas transferencias, el nivel de pobreza en el país sería mayor", afirmó, subrayando que estos apoyos, aunque limitados, cumplen un papel fundamental en evitar que muchas familias caigan en una situación aún más precaria.

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Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censo, la pobreza general en Panamá se encuentra actualmente en 21.7%, mientras que la pobreza extrema afecta al 9.6% de la población, es decir, cerca de 500,000 personas. Para muchos de ellos, los subsidios representan su única fuente de ingreso para cubrir necesidades básicas.

Entre los programas con mayor alcance destaca "120 a los 65", que beneficia a más de 117,000 adultos mayores. El programa Ángel Guardián, dirigido a personas con discapacidad, atiende a 19,240 beneficiarios, mientras que la Red de Oportunidades destina más de 6 millones de dólares a hogares en condiciones de vulnerabilidad.

No obstante, hay denuncias sobre demoras y falta de equidad en la distribución. Es el caso de una mujer en Chiriquí que lleva más de siete años solicitando la inclusión de su tío, con movilidad reducida, en el programa Ángel Guardián: "Denle ayuda a ese señor que de verdad lo necesita, ya que hay personas que la están recibiendo sin necesitarla, y él sí la necesita", reclamó.

De cara al año 2026, el presupuesto general del Estado contempla 3,087 millones de dólares para programas sociales, entre ellos los gestionados por el MIides. La pregunta clave sigue sin respuesta definitiva: ¿están estos programas ayudando realmente a sacar a la población de la pobreza, o solo la mantienen a flote en un sistema que necesita reformas más profundas?

Con información de Luis Mendoza