"A-Rod" demanda a médicos de Yanquis y a hospital
Alex Rodríguez demandó al médico de los Yanquis y a un hospital de Nueva York, acusándolos de impericia en el tratamiento que recibió durante los playoffs de la Liga Americana en 2012. En una demanda radicada el viernes por la noche en la Corte Suprema de Nueva York, los abogados de Rodríguez dicen que el antesalista de los Yanquis fue sometido a una resonancia magnética el 11 de octubre de 2012 que reveló una lesión en la articulación de la cadera izquierda. La demanda señala que el médico de los Yanquis, Christopher Ahmad, no le informó sobre el desgarro y en cambio le dio el visto bueno para seguir jugando, por lo que es acusado de impericia. Como resultado, la demanda alega que la condición de Rodríguez empeoró y el toletero sufrió "gran dolor, agonía, lesión, sufrimiento, incapacidad, hospitalización, al igual que angustia mental y emocional". El Hospital Presbiteriano de Nueva York también es blanco de la demanda. "No vamos a comentar, debido a que hay una caso pendiente", dijo el sábado la vocera del hospital, Myrna Manners. Ahmad no respondió de inmediato las llamadas telefónicas para pedirle una reacción. El hospital y Ahmad podrían alegar que el foro adecuado para la querella de Rodríguez es el programa de incapacidad laboral o el proceso de querellas de Grandes Ligas y el sindicato de peloteros. El sindicato intenta revocar la suspensión de 211 partidos que Grandes Ligas impuso el 5 de agosto a Rodríguez por supuestas violaciones del reglamento antidopaje y el convenio laboral del béisbol. La sanción fue pospuesta mientras se dilucidaba la apelación, y las audiencias comenzaron el lunes bajo la supervisión del juez Frederic Horowitz. A menos que haya un acuerdo, el fallo en ese proceso debe demorar varios meses. El diario New York Times también reportó el sábado que los abogados de Rodríguez en el bufete Reed Smith enviaron una carta el 22 de agosto al abogado del sindicato, David Prouty, pidiéndole que el abogado de la unión sea reemplazado por un abogado personal de Rodríguez en el proceso de apelación. Los abogados también criticaron al jefe del sindicato, Michael Weiner, por comentarios que hizo sobre el caso. Rodríguez bateó .120 (25-3), sin remolcadas, durante los playoffs de 2012. Fue operado de la cadera en enero, y no se reincorporó a los Yanquis hasta agosto. Uno de los abogados de Rodríguez, Joseph Tacopina, dijo en agosto que los Yanquis "lo mandaron (al terreno) en una condición en la que ni siquiera debía estar caminando, mucho menos jugando béisbol". Los Yanquis dicen que, en ese momento, Rodríguez se había quejado sólo de un problema en la cadera derecha, no la izquierda. A-Rod fue operado de la cadera derecha en 2009. Rodríguez radicó la demanda por impericia médica un día después que demandó a Grandes Ligas y su comisionado Bud Selig, acusándolos de participar en una "cacería de brujas" para obligarlo a abandonar el béisbol, como parte de su investigación del caso de la clínica Biogenesis of America. Ambas demandas se produjeron la misma semana que comenzaron sus audiencias sobre su suspensión. Otros 13 jugadores aceptaron sus castigos por vínculos con Biogenesis, incluyendo al ex jugador más valioso de la Liga Nacional, Ryan Braun, quien fue suspendido por los últimos 65 partidos de la temporada de los Cerveceros de Milwaukee. La carta de agosto de los abogados de Rodríguez al sindicato de jugadores acusa al gremio de no "representar justamente sus intereses", y dice que "empeoró la situación al no apelar las tácticas de matón de Grandes Ligas en su investigación". Los abogados de A-Rod criticaron a Weiner por decir en una entrevista en agosto con XM Radio que recomendó al antesalista aceptar una suspensión de cierta duración, menor a lo que Grandes Ligas estaba dispuesta a negociar. Dijeron en la carta que los comentarios de Weiner podrían "corromper irremediablemente el proceso de arbitraje" y "son inconsistentes con el deber del sindicato de representar justamente y con vehemencia al señor Rodríguez". El vocero de Rodríguez, Ron Berkowitz, rehusó comentar sobre la última demanda y la carta.