Clásico: EEUU tuvo obstáculo de todo tipo
LOS ANGELES (AP) — Lesiones a diestra y siniestra, apatía del público y hasta de sus propios jugadores y manager. Esos fueron algunos de los obstáculos que Estados Unidos enfrentó en el Clásico Mundial de Béisbol, del que se despidió el domingo en semifinales al caer por 9-4 frente a Japón. Ese partido en realidad fue una de las mejores actuaciones del equipo norteamericano, que luchó hasta el final y finalmente sucumbió ante un racimo nipón de tres carreras en el octavo inning. Estados Unidos mejoró su actuación de 2006, cuando fue eliminado en segunda ronda, pero sus problemas en esta edición del torneo comenzaron desde mucho antes del duelo en el Dodger Stadium. La confección de su equipo fue todo un dolor de cabeza por la decisión de no jugar de figuras como CC Sabathia, Ryan Howard y Derrek Lee, en una evidente muestra de desinterés. Luego llegaron las lesiones: Dustin Pedroia, Kevin Youkilis, Chipper Jones y Matt Lindstrom quedaron fuera en la segunda ronda en Miami por distintas dolencias, casi todas relacionadas con problemas musculares, una clara señal de que los jugadores no estaban en su mejor condición física para disputar el torneo. El propio manager Davey Johnson reconoció hace unos días que sus bateadores no estarán preparados como para jugar a su mejor nivel hasta finales de marzo, y dijo que "la mayoría apenas están empezando a agarrar el ritmo y fortaleciéndose". "Con los pitchers es lo mismo, no van a estar listos hasta finales de marzo", agregó. Ni hablar de Johnson. El ex piloto de Grandes Ligas se tomó el torneo casi que a broma, dejando a pitchers en la lomita más de la cuenta, como hizo con Jake Peavy cuando fue apaleado con seis carreras en dos innings en la derrota por 11-1 frente a Puerto Rico en Miami. En esa ocasión, la explicación de Johnson para no sacar a Peavy cuando los bateadores boricuas lo estaban masacrando era que el as de los Padres de San Diego necesitaba "trabajar". En otras palabras, que a falta de los partidos de pretemporada en los campos de entrenamiento, su práctica para la temporada de Grandes Ligas era el Clásico, sin importar si de paso Estados Unidos era humillado en un torneo oficial. "Creo que tuvimos buenos jugadores. Esto fue sólo un partido", comentó Johnson luego de su revés ante Japón. "Algunos de nuestros pitchers no están en tan buena condición como los lanzadores japoneses". "Creo que nuestros bateadores cayeron en tiempo. Al principio (del torneo) estaban atrasados (en la preparación). Algunos de los otros equipos estaban más adelantados (en su preparación). Pero en términos generales, creo que presentamos un buen espectáculo". La fecha del torneo, a mediados de marzo, no beneficia al equipo que fue anfitrión de la segunda ronda en adelante. Muchos de sus jugadores, acostumbrados en esas fechas a estar llegando a los campos de entrenamiento, no están en óptimas condiciones físicas, a diferencia de jugadores como los japoneses cuya pretemporada arranca en enero o los latinoamericanos, que tienen las ligas invernales para prepararse. Además, Estados Unidos prácticamente jugó como visitante en su propia casa, ya que el público estadounidense pasó por alto el campeonato. Eso quedó en evidencia en Miami, donde Estados Unidos jugó contra Puerto Rico y Venezuela y en las gradas hubo más seguidores de esos dos países latinoamericanos. "Eso demuestra la pasión que estos otros países tienen por el béisbol", indicó el torpedero estadounidense Jimmy Rollins. "En Estados Unidos tenemos muchos deportes, básquetbol, fútbol americano, así que nuestra atención está en el deporte de la temporada. Pero en otros países, cuando su equipo y su país está jugando, lo respaldan al 100 por ciento".