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La “Droga de la Barbie” es un producto ilegal que promete un bronceado rápido pero que puede causar daños graves a la salud. El compuesto, llamado Melanotan II, se fabrica de forma clandestina y se vende sin control a través de internet, principalmente en redes sociales.
Este péptido sintético, que estimula la producción de melanina el pigmento responsable del color de la piel, ha ganado popularidad entre jóvenes que buscan un tono bronceado sin exponerse al sol. Sin embargo, ninguna autoridad sanitaria en Europa, Estados Unidos o Australia ha aprobado su uso, y los especialistas advierten que los riesgos superan por mucho los supuestos beneficios estéticos.
El Colegio Oficial de Médicos de Tenerife, en España, alertó sobre las graves consecuencias del uso del Melanotan II, conocido también como “droga Barbie”, “bronceador Barbie” o “tan jab”. Según los expertos, esta sustancia no garantiza un bronceado seguro y puede provocar reacciones adversas severas.
“La piel no olvida y todo daño solar es acumulativo”, advirtió la dermatóloga Marina Rodríguez Martín, quien pidió extremar precauciones frente a la creciente promoción del producto en redes sociales. “No existe un bronceado seguro con Melanotan”, enfatizó la especialista.
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A pesar de las advertencias, el producto se vende en múltiples formatos inyecciones subcutáneas, aerosoles nasales, cremas o pastillas, todos distribuidos en canales no oficiales. Su fácil acceso y los testimonios falsos en redes sociales han contribuido a su expansión entre los jóvenes europeos, que desconocen sus verdaderos efectos secundarios.
De acuerdo con los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH), el Melanotan II es un análogo sintético de la hormona estimulante de los melanocitos (MSH), creada originalmente con fines médicos para tratar enfermedades relacionadas con la sensibilidad a la luz y algunos tipos de disfunción sexual. No obstante, su uso se desvió hacia el ámbito estético, impulsado por la búsqueda de un “bronceado perfecto”.
El problema, según advierten los expertos, es que su administración fuera de entornos clínicos genera una falsa sensación de protección solar, lo que lleva a muchas personas a exponerse más tiempo al sol, aumentando el riesgo de quemaduras, envejecimiento prematuro y cáncer de piel.
Además, el uso prolongado o en dosis no controladas puede causar náuseas, aumento de la presión arterial, cambios en la pigmentación de lunares, alteraciones hormonales y daño en órganos internos, según los estudios citados por el NIH.
El médico farmacéutico Álvaro Fernández, a través de sus redes sociales, advirtió que esta sustancia “se está volviendo a poner de moda” y que algunos usuarios no solo la emplean por motivos estéticos, sino también porque creen que puede aumentar la libido o reducir el apetito. Sin embargo, aclaró que no existen estudios clínicos que respalden esos efectos.
Los expertos coinciden en que el auge de la “Droga de la Barbie” está directamente relacionado con el poder de las redes sociales, donde influencers y vendedores anónimos difunden sus supuestos beneficios sin mencionar los riesgos. Esta tendencia preocupa especialmente a los dermatólogos, que advierten que el público más joven es el más vulnerable a caer en prácticas estéticas peligrosas.
Tanto el Ministerio de Sanidad español como diversas agencias europeas han reforzado los controles para identificar páginas web y perfiles que comercializan el Melanotan II. Sin embargo, su distribución continúa creciendo en el mercado negro.
“La apariencia nunca debe ponerse por encima de la salud”, subrayó la dermatóloga Rodríguez Martín, recordando que la única forma segura de cuidar la piel es utilizando protector solar y evitando la exposición prolongada al sol.
El caso de la “Droga de la Barbie” es un recordatorio contundente de los riesgos del consumo de productos estéticos sin regulación médica, una moda que, aunque promete belleza instantánea, puede tener consecuencias irreversibles.