Crisis hídrica en Azuero impulsa multas ambientales, pero expertos urgen soluciones integrales
Medida del Ministerio de Ambiente impone sanciones de hasta $9,999 a contaminadores, mientras 100 mil personas en azuero siguen sin agua potable.
El ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, anunció ayer la imposición de multas de hasta $9,999 a quienes contaminen los afluentes del río La Villa, a partir de hoy. Esta medida responde a la severa crisis ambiental que ha dejado a más de 100 mil personas en la región de Azuero sin agua potable.
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La decisión ha generado reacciones entre activistas y expertos. Milcíades Pinzón, profesor de la Universidad de Panamá, sociólogo y activista con años clamando por la ordenación territorial y el control de los focos de contaminación en la zona, valoró la acción.
"Me parece bien que se actúe en este sentido, pero nosotros estamos claros en que estas sanciones representan una actividad para contener un poco la situación que se vive en la península, pero es una solución parcial, provisional", expresó Pinzón. El sociólogo también criticó la limitación legal, señalando que cuando un problema de esta magnitud, por ejemplo, solamente se le permite al Ministerio de Ambiente sancionar con $9,999, es decir, redondeando a $10,000", esto demuestra las deficiencias legales.
Clamor por una solución integral.
Para Pinzón, la aspiración va más allá de las multas. "Nosotros aspiramos a una solución integral, la solución definitiva que pasa naturalmente por estas sanciones que, insisto, me parecen bien, pero aspiramos a que logremos en el país, no solamente para el río La Villa, sino para el conjunto de la hidrografía de la República de Panamá, contener estos avances. Esto en La Villa es simplemente el rostro de lo que viene para el resto de la república".
La situación actual en la región sigue siendo desafiante. La población continúa recolectando agua en tanques distribuidos en plazas, generando una profunda incertidumbre sobre la calidad del agua. Aunque ahora hay agua para lo básico en las casas, no es agua potable. Pinzón enfatizó la necesidad de una visión a largo plazo por parte del gobierno, pues "es importante que en esta región y que el gobierno piensen a más largo plazo".
Desafíos ambientales nacionales
El problema del río La Villa, según Pinzón, es un síntoma de una problemática ambiental nacional que demanda atención urgente.
"Lo que más me preocupa, aparte del asunto del río La Villa, es la situación nacional ambiental que debe ser atendida como corresponde", manifestó.
Criticó la falta de implementación de leyes existentes: "Por falta de leyes, no. Aquí hay leyes para todo en la República de Panamá; lo que necesitamos es que se implemente eso, sí que realmente esas decisiones sean de una vez por todas y logren definir y resolver en mayor parte el problema".
Actividad porcina
Pinzón confirmó que se han tomado medidas para contener actividades en algunas áreas porcinas, pero señaló que existen otros problemas graves como los agroquímicos en Santa María de Coria, la contaminación de aguas en Tonosí, y los problemas en los ríos Guararé y Mensabé, entre otros.
Vertederos
Otro tema crítico es la gestión de vertederos, como el caso de Chitré, donde la gran cantidad de basura es un problema serio. Pinzón explicó que, para un manejo más industrializado de los residuos, varios distritos tendrían que unirse, un proyecto que previamente fue rechazado por la población.
Alertó sobre elimpacto ambiental de estos vertederos: "Cuando soplan los vientos alisios, todas esas micropartículas llegan hasta el área de la cordillera". La región también enfrenta problemas graves con los manglares que han sido socavados y destruidos, señaló.
El sociólogo hizo un llamado a la vigilancia institucional, lamentando la dilución de responsabilidades entre múltiples ministerios.
Propuestas del CIAM
La propuesta del Centro de Incidencia Ambiental (CIAM) de establecer cuatro grandes vertederos regionales manejados por una institución centralizada y no por los municipios fue apoyada por Pinzón.
"Yo creo que tiene que ser una institución porque recuerda que los municipios casi todos son subsidiados, no cuentan con los recursos suficientes", argumentó.
Coincide en que la basura también puede ser una fuente de valor, sugiriendo que la concentración de residuos en sitios industriales “pueda converger porque esa es otra cosa, pues la cantidad de basura que hay, aunque es mucha para un país como Panamá, industrialmente necesitamos que toda la basura de esos municipios, como dice CIAM acertadamente, converja en un solo sitio y podamos también, porque la basura también es dinero", puntualizó.
¿Qué ocurrió en Azuero?
El pasado fin de semana, tras sus señalamientos hacia algunas fincas de porcicultores como uno de los factores que estarían contaminando el río La Villa, representantes del sector porcino rechazaron las acusaciones.
Juan Guevara, presidente de la Asociación de Porcinocultores Unidos de Panamá, afirmó, en su momento, que “ninguna granja inspeccionada está contaminando ríos directamente”.
A finales de mayo, el Gobierno suspendió el consumo de agua en varias comunidades de Azuero tras detectarse lixiviados del vertedero, residuos de tanques sépticos y coliformes fecales de cerdos en las fuentes hídricas.